El día de hoy, la ex colonia francesa se ha visto enfrentada a una toma de rehenes en su hotel Radisson Blu, entre los cuales se encontraban ciudadanos franceses, alemanas, asiáticos, turcos, entre otros.
Todo inicia con los disparos de 5 personas, luego se supo eran 13, que llegaron en autos diplomáticos al hotel y tomaron como rehenes a aproximadamente 170 personas, de las cuales se presume 125 son huéspedes del hotel.
El Radisson es conocido por ser el lugar de reunión de oficiales y diplomáticos, y en estos días, de acuerdo con el grupo Rezidor (operadores del Radisson), se estaba desarrollando un encuentro de la Organización Internacional de la Francofonía.
Los perpetradores entraron gritando «Alaho Akbar», Dios es Grande, antes de iniciar los disparos hacia los guardias y tomar los rehenes. A final del día de ayer anunciaron que el atentado dejo 40 fallecidos, entre esos, 13 atacantes.
De acuerdo con fuentes militares, al menos 30 rehenes escaparon del lugar por sus propios medios. Salif Traoé, ministro de Seguridad afirmó que «las fuerzas de seguridad liberaron a unos 30 rehenes, y otros pudieron escaparse».
Las fuerzas de seguridad de Malí, que aparentemente han contado con apoyo de Naciones Unidas (la misión MINUSMA) y efectivos de la operación francesa Barkhane, se desplazaron hasta el lugar y crearon un perímetro de seguridad en torno al hotel. Entraron liberando 50 personas, y continuaron con ayuda estadounidense la neutralización de la toma.
Las cifras de rehenes rescatados o liberados hasta el momento no es clara, aunque el Ministerio del Interior resaltó que ya no hay rehenes a manos de los terroristas.
La teniente coronel Michelle Baldanza resaltó: «las fuerzas estadounidenses ayudan a poner a los civiles en lugares seguros mientras las fuerzas malienses recuperan el hotel».
De acuerdo con algunos rehenes, los perpetradores llevaban chalecos suicidas, y soltaron a aquellos que pudieron citar el Corán de memoria.
Hasta el momento no se ha determinado el origen de los perpetradores o qué a grupo pertenecen, no obstante, se supone que Al Qaeda fue el responsable debido a la reivindicación de la autoría del crimen en twitter.
En primer lugar, en Malí se encuentran activos principalmente el Frente de Liberación Macina, encabezado por Amadou Kouffa, la filial local de Al Qaeda, Al Murabitún, y el grupo religioso extremista Ansar Dine, cuyo líder es Iyad Ag Ghaly. Luego de la ocupación yihadista y la firma de acuerdo con los tuareg separatistas, estos grupos han adquirido más poder.
Hace ocho meses se dio un ataque en el bar La Terrasse, donde fallecieron cinco personas. Así mismo, en agosto realizaron atacaron el hotel Byblos en Sevaré, afuera de la ciudad de Mopti, de donde es el líder el grupo; la cual dejó una docena de muertos. Se supone contó con el liderazgo de Mokhtar Belmokhtar, coordinador del Magreb de Al Qaeda.
La presencia de Francia en la zona al igual que el uso de Timbuktú por el país francófono para coordinar ataques a ISIS en Siria se presume como uno de los elementos explicativos de esta situación, debido a que también afectan a Al Qaeda. Igualmente, la coincidencia sobre el congreso internacional de países de lengua francesa puede explicar varias cosas.
Precisamente el pasado 18 de noviembre, con la captura de uno de los miembros del FLM, Bokary en un operativo de las fuerzas armadas, Iyad Ag Ghaly, líder de Ansar Dine, pidió en un video continuar los ataques contra Francia. Además, precisamente este grupo declaró su alianza con ISIS.
A pesar que estos grupos parecieren más aliados de Al Qaeda, no se puede descartar su posible futura afiliación al E.I. Y es que ambos grupos son expertos en reclutar organizaciones con alcance local para sus causas. Alguna de estas organizaciones se han alineado con ISIS a pesar de haberse coordinado previamente con Al Qaeda, y vice versa.
ISIS ha batallado con Al Qaeda por «el corazón» de los islamistas, aceptando solicitudes de alianzas de varios grupos adicionales, incluyendo Ansar Bayt al-Maqdisi in en la región del Sinaí en Egipto y las milicias pro Gadafi en Libia. Entre estos grupos se encuentra Boko Haram, el más sangriento y fortalecido de África. Hasta 2014 había matado 11,000 personas, y 6,000 solo en ese año.
Boko Haram, se encuentra activo en Nigeria, y liderado por Abubakar Shekau. En 2014 este grupo a través de su líder publicó un video en apoyo al líder de ISIS, Baghdadi, plantenado «Mis hermanos… Alá está con ustedes».
Frente a esta alianza, Daveed Gartenstein-Ross, socio en la Fundación de Defensa de Democracias expresó que esto «no lo puede enfatizar lo suficiente. Cambia el juego», refiriéndose al poder de presencia que le da a ISIS en África.
Y es que tanto Al Qaeda como ISIS están reclutando en África y peleándose por control. Lo anterior resalta cómo han ido utilizando el discurso musulmán yihadista y la identidad para unir a grupos armados a su causa.
El líder de Ansar Dine precisamente recalcó: «llamo a nuestra orgullosa gente musulmana cuya santidad fue violada por los franceses y sus aliados, a pararse en un solo flanco en a cara al histórico y odioso enemigo de los musulmanes y revivir el espíritu de cooperación entre musulmanes.». Resalta su apoyo a «todos los hermanos muyahadin (que hacen la yihad) en todos los campos de la yihad, en Nigeria, Somalia, África Central, el Magreb Islámico, Afganistán, Pakistán, Filipinas, el Emirato Islámico del Caúcaso, la Península arabiga en Yemen, Egipto, Iraq y Sham (Siria). Estamos listos para unirnos con nuestros hermanos muyahadines en el campo de Mali para confrontar la alianza contra la cruzada y la falta de creencia mundial».
Este hecho demuestra la movilidad y capacidad de unión de estos grupos, pero principalmente la función del discurso ideológico de los grupos yihadistas, y su facilidad de expansión a través de países islamistas, particularmente al tener un enemigo común: Francia, ex colonizador del Magreb y de países como Siria (ver Una guerra de civilizaciones: el pasado, el presente y el futuro de las intervenciones en medio oriente).