El grupo Omar Brigades lanzó un misil a territorio israelí, el cual alcanzó el terreno del consejo regional de Sha’ar HaNegev. De acuerdo con las autoridades de defensa del país, el misil impactó una zona despoblada, por lo cual no causó víctimas ni daños materiales.
No obstante, la Fuerza Área de Israel en retaliación realizó ataques aéreos en contra de presuntos objetivos militares del grupo palestino Hamás. De acuerdo con testigos, los ataques causaron grandes daños.
Estos incluyeron el lanzamiento de al menos dos misiles al ala militar de Hamás, el movimiento Brigadas Ezzedine al Qassam. El primer objetivo fue una comisaría de Policía y el segundo el centro de formación del grupo Abu Jarad.
No obstante, se presume que el misil a Israel en realidad tiene como base enfrentamientos al interior de las zonas palestinas.
Tan solo el martes las fuerzas de seguridad de Hamas asesinaron un líder salafista en Gaza, al incrementar los operativos en contra de grupos armados en la zona, en donde se encuentran miembros de ese grupo que son aliados a E.I.
Estos grupos, en su mayoría suníes se han declarado en contra del mandato de Hamas por cumplir con el cese al fuego con Israel, y por lo que consideran incumplimientos a la estricta ley sharia que desean aplicar.
Precisamente un miembro de este grupo se pronunció en Twitter diciendo que el ataque respondió a una retaliación en contra de Hamas por el asesinato del salafista mencionado.
Trinó que «continuamos nuestra yihad en contra judíos, los enemigos de Dios, y nadie nos podrá detener».
No obstante, para el Ministro de Defensa israelí, Moshe Yaalon, el responsable de los ataques en el territorio de Israel es Hamas «así los que cometieran el ataque sean grupos rebeldes pertenecientes a grupos yihadistas globales tratando de retar a Hamas disparándonos».
Con este hecho se da fin a un cese al fuego de 50 días firmado en agosto con el apoyo de Egipto.
