Las recientes noticias de un ataque con 59 misiles balísticos de USA a Siria; y del envío de tropas por parte del gobierno americano a aguas cercanas al territorio de corea del norte; han generado reacciones de amenazas verbales de hostilidades por parte del denominado eje rojo (Corea del norte, China, Rusia, e Irán) a USA y a sus aliados más cercanos en la zona, como son Japón y Corea del sur.
Por otra parte, también es posible prever un sismo de proporciones similares, pero en el área financiera; sino se hace una labor conjunta y consensuada de USA y China, al tema de los controles a la tasa de cambio y a las reservas de divisas Chinas. Este crucial tema, tiene origen en el hecho, que es mucho más alto el ahorro que la inversión en China; y que los excedentes terminan siendo colocados en el exterior en forma de Superávits. De lo anterior, se produce una contradicción, en la que a pesar del persistente superávit comercial en China, las reservas de divisas del país, vienen cayendo de US$ 4billones en Junio/14 a US$ 3 billones en Enero/17.
Todo lo precedente indica, que no solo es la defensa estratégica de la geopolítica y la política energética y de hidrocarburos lo que esté en juego; Sino también las políticas macroeconómicas y financieras globales, que se pueden ver grandemente afectadas con el posible distanciamiento de las relaciones político-Económicas de USA y China, por la distensión en el denominado eje rojo. Pues, las autoridades chinas están en una trampa o detienen el crédito y dejan que la inversión se contraiga; y generan una recesión en el pais; y/o generan un enorme superávit comercial.
Así las cosas, la interdependencia de la economía mundial y el fenómeno de la globalización, exigen un fluido diálogo entre estas y otras potencias mundiales, que van a exigir el atemperamiento de la distensión, para manejar los posibles desequilibrios de la economía de China y la Economía mundial.
Estamos entonces a la expectativa, de cómo manejen sus emociones, líderes como Trump, Putin, y Kim jong-Un entre otros, no solo por el equilibrio Geopolítico, sino por el equilibrio macroeconómico global.
Henry Amorocho Moreno
