Por Juan Carlos Martínez

Justo por esta fecha en 2017 los aspirantes colombianos a la nominación presidencial con cargos en la gruesa burocracia del Estado en la Vicepresidencia de la República, gabinete ministerial, Congreso de la República, embajadores, deberán ir bajándose de las camionetas blindadas oficiales en busca del aval de los partidos políticos e iniciar la campaña por la carrera de llegar a la Casa de Nariño 2018-2022.

Los defensores del proceso de diálogo de paz con las terroristas FARC quieren meter como candidato abuelo al ex vicepresidente del país americano y jefe de la delegación del gobierno en La Habana, Humberto de la Calle Lombana quien en julio cumplirá 70 años de nacido en la provincia cafetera de Caldas, con el posible apoyo de los movimientos de izquierda, Liberal, gobiernista ‘U’, un sector Conservador, Verdes, Opción Ciudadana y otras minorías sentadas en el Capitolio Nacional. Aunque no parece que el abuelo precandidato es de bien recibo en el abuelito senador Horacio Serpa Uribe jefe del liberalismo después que le dejó tirada la vicepresidencia de la República al gobernante 1994-1998 Ernesto Samper Pizano cuando que estalló el proceso 8.000.

 Pero en política no hay amistades, hay son intereses y eso no va a cambiar. De la Calle Lombana no es empleado oficial pero sí debe tener un contrato pagado por el PNUD u otra entidad internacional que no lo arropa el año de la inhabilidad. En el Jeep presidencial querrán hacer subir a otros más jóvenes como Mauricio Cárdenas Santamaría diezmado electoralmente por la aplazada Reforma Tributaria que va por que va con todos los ‘juguetes’ de Impuesto al Valor Agregado en el desocupado bolsillo de los contribuyentes pobres después que se vote el plebiscito para refrendar los acuerdos con las FARC.

 “Ponerle IVA a la leche, el pan, la carne y los alimentos de los colombianos, es más subversivo que las FARC”, solía decir el prominente senador Liberal, Víctor Renán Barco, ‘padre adoptivo’ del IVA que arrancó en el gobierno del Presidente Belisario Betancur con el 2 por ciento y ahora pretenden saltarlo del 16 al 19%. Uruguay, Argentina, Chile se mueven en 22, 21 y 19.

 Ponen a sonar a los ‘niños’ y distraer en la vitrina en el ingenuo electorado menudo colombiano a Simón Gaviria Muñoz, Juan Manuel Galán Pachón, Claudia López, Luis Fernando Velasco, Iván Duque; otros cincuentones como Sergio Fajardo, Alejandro Ordóñez, Gustavo Petro; las ‘añejas’ candidatas (os) Marta Lucía Ramírez, Jorge Enrique Robledo, Clarita López. Un botiquín del que los medios de prensa se encargan de orquestar, inflar y desinflar dependiendo del tamaño de la pauta publicitaria.

 Pero hay uno que lleva kilómetros de delantera en dos años de campaña para llevarse a dormir al cuarto presidencial de la Casa Amarilla del centro de Bogotá, la exmodelo y expresentadora en ‘Panorama’ de JES Televisión junto a los traviesos Julio y Jaime Sánchez Cristo, Luz María Zapata Zapata.

 El candidato anticipado avalado por Cambio Radical y la poderosa casa caribeña Char, Germán Vargas Lleras que el viernes con intensas terapias y radioterapia celebrará 54 años de nacido en Bogotá. Él, es el detalle: está enfermo. Justo a un año para que renuncie a la Vicepresidencia de la República como lo redactó el Parlamento en la Ley Equilibrio de Poderes, Vargas Lleras tiene limitación con la hoy precaria salud para someterse a la maratónica gira por el país inaugurando obras de infraestructura 4G.

 No aguantó el 2 de diciembre en Floridablanca, provincia de Santander. Su cuerpo no da más. Aunque no se quiera admitir, Germán está enfermo. La radioterapia es un campanazo si quiere llegar a viejo. Es el Vicepresidente de la República y sobre su estado salud la manejan con celosa discreción aunque Vargas Lleras por twitter para evitar especulaciones informó al país que la cirugía en el cráneo del 20 de enero para extirpar tumor supuestamente no cancerígeno, le dejó secuelas en la movilidad de la pierna derecha. Germán está enfermo y no aguanta más el trote, el ritmo de vida laboral de casi 18 horas diarias. Como dicen los muchachos es un ‘man’ camellador, huraño, gritón, de trompadas y madrazos pero de resultados.

 El mismo comportamiento del abuelo ex Presidente de Colombia 1966-1970, Carlos Lleras Restrepo. Tuve la oportunidad de entrevistarlo varias veces para el Personaje de la Semana en la cadena de emisoras TODELAR y de reproducir sus editoriales en la Revista Nueva Frontera que, como su nieto Germán, acostumbraba trabajar y escribir de noche

 Esta página se redacta con pragmatismo, el país no vota por candidatos enfermos. En 2010 virtualmente estaba inflado Antanas Mockus y ‘pinchó’ cuando el electorado, inclusive, sus propios muchachos de las redes sociales no timbraron la X en el tarjetón para la Presidencia de la República.

 He recorrido 43 años en los medios de comunicación principalmente en radio, de ellos, 34 en la reportería política para Radio Súper, Caracol, Radio Sutatenza, Telediario de Arturo Abella, corresponsal Servicio Informativo para los Estados Unidos, RCN, blog El Tiempo, y otros medios nacionales e internacionales como TNN@, estudios de derecho Universidad Autónoma de Colombia, tiempo durante el cual – hace 27 años- conocí al joven Germán secretario general del Partido Liberal con poderosa voz que envidiarán los lectores de noticias en radio y televisión. Estaba sano.

 El detalle final: la candidatura presidencial de Vargas Lleras la pudo haber ‘matado’ el maldito cigarrillo y el whisky.