El candidato derechista a la Presidencia de Chile, Sebastián Piñera, es el virtual ganador de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, celebradas este domingo en Chile.
Con un total del 96,31 % de las mesas escrutadas, Piñera obtiene el 54,57 % de los votos, frente el 45,43 % del aspirante oficialista, el senador Alejandro Guillier.
De este modo, Piñera, que ya gobernó el país entre 2010 y 2014, se convierte en el próximo presidente de Chile para el período 2018-2022, sucediendo por segunda vez en la historia a Michelle Bachelet.
En el comando electoral del candidato de Chile Vamos el ambiente de victoria era palpable al conocer los resultados parciales.
“Recibimos estos resultados con mucha humildad, significan mucho”, declaró Cristóbal Piñera Morel, hijo menor del expresidente.
“Mi papá no es de las personas que se confía ni canta victoria antes de tiempo, pero está muy contento”, añadió.
En tanto, la ex primera dama Cecilia Morel dijo sentirse muy feliz y contenta.
“No pensé que la diferencia iba a ser tan enorme, pero así se han dado las cosas, y estamos muy agradecidos de la gente que confió en nosotros”, declaró la esposa del exgobernante, quien hizo un llamamiento a la calma y la tranquilidad”.
La euforia contenida contrastaba con el pesimismo en el cuartel general de Alejandro Guillier, donde la exministra democristiana Yasna Provoste reconoció que los datos le son adversos a su candidato.
“Efectivamente, es una situación muy compleja, tenemos 300.000 electores menos que la elección pasada, teníamos que ser capaces de convocar a muchas más personas a votar”.
Provoste reconoció que para ganar en el balotaje, la candidatura de Guillier tendría que haber remontado el resultado de la primera vuelta, “cuando la centro izquierda votó dividida”. “Ojalá que tengamos un resultado final distinto al que estamos viendo”, agregó.
En tanto, la senadora socialista Isabel Allende, hija del expresidente Salvador Allende, manifestó que “la política no es sólo de gestos”, sino que también “hay convicciones y principios”.
“A nosotros nos hubiese gustado que votara más gente, pero se está mostrando una tendencia y es imposible ignorarla”.
“La presidenta (Michelle) Bachelet tendrá que tomar desayuno mañana con el candidato de la derecha, pero la democracia es así y hay que respetarla”, dijo Allende en alusión a una tradición republicana en virtud.