La entidad indicó que no hay evidencias factibles para hacer la declaratoria en Bogotá. Sin embargo, instó al uso racional del agua.
El Comité Nacional Conjunto para el Conocimiento del Riesgo y Manejo de Desastres, liderado por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), decidió no declarar la situación de desastre por sequía y desabastecimiento de agua en Bogotá.
La decisión se basó en un análisis técnico que sugirió acogerse a la declaratoria vigente por el fenómeno de El Niño, establecida en el Decreto 037-2024, que establece el buen uso racional del agua.
A pesar de los bajos niveles de los embalses del Sistema Chingaza, que actualmente se encuentran al 44,25%, el comité consideró que no hay evidencia suficiente para justificar una nueva declaratoria de desastre.
Sin embargo, las autoridades advirtieron que las acciones de mitigación son urgentes para enfrentar el desabastecimiento de agua en la capital del país.
Entre las recomendaciones del comité, está la inclusión de medidas adicionales en el Plan de Acción Específico (PAE) del Decreto 037-2024. Estas medidas incluyen la exploración de aguas subterráneas y una mayor coordinación entre la Empresa de Acueducto de Bogotá y las entidades nacionales, para monitorear la situación hidrológica.
“La votación fue unánime para no declarar el desastre en este momento, pero implementaremos acciones para reducir el riesgo y garantizar el suministro de agua”, afirmó Carlos Carrillo, director de la Unidad de Gestión del Riesgo.
Por su parte, el Instituto Distrital de Gestión de Riesgo (Idiger) y la Empresa de Acueducto de Bogotá (EAAB) destacaron que las acciones implementadas hasta la fecha lograron reducir la presión sobre el sistema de embalses.
“Esta decisión confirma que hemos avanzado, pero debemos seguir trabajando en la reducción del consumo y en medidas de largo plazo”, aseguró Natasha Avendaño, gerente de la Empresa de Acueducto de Bogotá.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) señaló que la situación podría cambiar en los próximos meses, ya que existe la posibilidad de una transición hacia el fenómeno de La Niña, lo que incrementaría las lluvias en varias regiones del país.
Finalmente, el comité enfatizó la necesidad de continuar monitoreando los embalses, aplicando medidas de ahorro de agua, manteniendo el racionamiento hasta marzo de 2025.
También hicieron un llamado a la ciudadanía para reducir el consumo de agua y estar atentos a las recomendaciones oficiales.