Después del conversatorio del día de ayer, donde se hizo evidente el apoyo de Jim Yong Kim, Presidente del Banco Mundial, al proceso de paz en Colombia, se anunció el esperado aporte financiero para este (ver Yo voy a llevar la historia de Colombia para transmitírsela al mundo entero: Presidente del Banco Mundial).

Pareciere que el Presidente Santos logró su objetivo, al menos parcialmente, debido a que Kim anunció que el Banco Mundial otorgará, una vez firmada la paz, 1.400 millones de USD a Colombia.

A pesar de que la mayoría de recursos se girarán en préstamos, Kim planteó que también habrá donaciones para completar el monto, a través de un Fondo Fiduciario Multi-Donantes «enfocado específicamente a apoyar la visión del gobierno en Colombia», como lo es la reparación a las víctimas.

El fondo actualmente solo tiene 7 millones USD pero Kim sostuvo «mi esperanza es que crezca rápidamente», articulando fondos tanto de la ONU como de la Unión Europea.

 No descartó aumentar la posibilidad de aumentar los recursos «si el gobierno quiere más». Y es que es muy probable que sí lo quiera, debido a que faltarían 1.600 millones USD para completar el plan de inversión del Gobierno, los cuales todavía debe ver cómo conseguir.

Otra de las líneas de intervención de Kim fue el potencial económico del país en materia de turismo. «Esperamos trabajar con el gobierno en turismo. Es un área de inmenso potencial de crecimiento», afirmó.

Lo cierto es que esta noticia, en línea con los objetivos del Gobierno, es un motivo más para presionar la firma del acuerdo antes del 23 de marzo de este año, algo que las FARC calificó como ingenuidad (ver Insistir en el 23 de marzo como fecha límite de los diálogos es una ingenuidad: Iván Márquez).

Pareciere entonces que la principal labor del Presidente y su equipo negociador es lograr convencer a las FARC de ponerle el acelerador a las negociaciones.