La pandemia de covid-19 y la crisis de combustibles aceleró la crisis económica en Venezuela -rico en recursos petroleros- según los resultados de un estudio de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB).
Desde 2014, el país ha sufrido escasez de suministros básicos y una de las hiperinflaciones más graves del mundo.
Millones de personas necesitan ayuda alimentaria y mejora urgente de ingresos.
En la presentación de la encuesta, el investigador y profesor de la UCAB Luis Pedro España explicó que el crecimiento de la pobreza ya ha llegado «a lo que podía ser el techo» de 94,5% y dudó de que esta vaya a crecer más.
“No va a crecer la pobreza, es su máximo posible porque tenemos un 5% (de la sociedad) que tiene cómo indexar (sus salarios) cuando hay inflación o mantener su nivel de ingreso a pesar de la recesión”, dijo ESPAÑA en diálogo con el NOTICIERO NACIONAL DIGITAL
La variación vista “básicamente es la pobreza extrema”, comentó
El gobierno no se ha pronunciado sobre estos nuevos números, pero generalmente argumenta que las sanciones estadounidenses agravan la situación económica del país.
Analistas, sin embargo, dicen que la crisis es el resultado de la mala gestión económica del presidente Nicolás Maduro.
Señalan que los servicios públicos colapsados, el desempleo disparado y las continuas devaluaciones de la moneda local son parte de la problemática.
El informe de la UCAB se basa en la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi).
Ahí se muestra que la pobreza extrema aumentó hasta el 76,6%, mientras que el año pasado se situaba en 67,7%.
Se considera que alguien está en extrema pobreza cuando vive con menos de US$1,90 al día.
El estudio también midió la pobreza multidimensional, que incluye diversas variables además de los ingresos como la vivienda, el empleo, los servicios o el empleo.
En ese aspecto, la Encovi muestra que el 65,2 % de los hogares de Venezuela están «en situación de privación».
La escasez crónica de combustible, que empeoró en 2020, y las restricciones impuestas por el gobierno para frenar la propagación de la covid-19 fueron los principales factores que contribuyeron al aumento, según el estudio.
Los más pobres fueron los más afectados, ya que no pudieron encontrar trabajo en un país donde una de cada dos personas trabaja en la economía informal y muchas viven al día.
El aumento de la pobreza extrema revirtió la mejora observada el 2020, que se produjo después de que el gobierno iniciara transferencias directas de efectivo a los más necesitados e implementara cambios económicos, incluida la relajación de los controles de precios.
A pesar de tener las mayores reservas de petróleo del mundo, Venezuela ha visto el colapso de su industria petrolera, responsable de casi todos los ingresos del gobierno, después de años de subinversión y mala gestión.
Más recientemente, las duras sanciones de Estados Unidos a las exportaciones de petróleo, aplicadas en respuesta a las controvertidas elecciones presidenciales de 2018, han contribuido a la crisis.
El reporte Encovi estimó que el Producto Interno Bruto (PIB) venezolano se contrajo un 74% entre 2014 y 2020.
El colapso económico ha provocado una crisis humanitaria en el país de 28 millones de habitantes.
Antes de la pandemia, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de Naciones Unidas estimó que una de cada tres personas luchaba por obtener alimentos suficientes para cumplir con los requisitos mínimos de nutrición.
La situación ha provocado una de las mayores crisis de desplazamiento del mundo, según la ONU, y más de 5,6 millones de personas han abandonado el país.
La encuesta Encovi se creó en 2014 para compensar la ausencia de datos oficiales.
Se realizó entre febrero y abril de este año mediante cuestionarios distribuidos a 14.000 hogares en 21 de los 23 estados de Venezuela.