Así lo informó el Presidente Juan Manuel Santos en alocución televisada, dijo que tomó la decisión con las Farc y las Naciones Unidas.
Las zonas veredales de transición y normalización, cuyo funcionamiento debía terminar esta semana, tendrán vigencia hasta el 1° de agosto, es decir, 60 días más.
Es decir, son 20 días más para el desarme y 60 días más para la reincorporación que, a juicio de Santos, “no es nada para terminar bien 53 años de enfrentamiento y violencia fratricida”.
“Este tiempo adicional nos permitirá poner en marcha debidamente el proceso de reincorporación a la vida civil y sin armas de los ex miembros de las Farc”, aseguro el Jefe del Estado
El Presidente aseguró que este cambio no afecta la decisión del Gobierno y las Farc de cumplir con lo acordado, y que el Mecanismo de Monitoreo y Verificación Internacional “seguirá ejerciendo su papel hasta certificar que la última arma de las Farc ha sido entregada y retirada del territorio nacional”.
Por otra parte, teniendo en cuenta que las facultades especiales que le concedió el Congreso para expedir decretos-ley en el marco de la implementación del Acuerdo de Paz se vencen hoy, el primer mandatario reveló que se han firmado más de 30 de dichos documentos. Entre ellos, el que crea la unidad de búsqueda de personas desaparecidas, el del acceso a la tierra, el de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial, el que permite que las empresas paguen sus impuestos construyendo directamente las obras que requiere la comunidad y el que crea la figura del pago por servicios ambientales.
El presidente Santos reiteró que se va a cumplir con lo acordado y enfatizó que, cumplidos estos primeros seis meses desde la firma del Acuerdo, ya se puede decir que la paz es irreversible. “No vamos a volver atrás. Por ningún motivo vamos a volver a las épocas terribles de la violencia, el miedo, los asesinatos y las masacres. Colombia está dejando atrás esa historia de sangre y dolor para siempre. La paz ha sido, es y será nuestro puerto de destino. La paz es el camino a la reconciliación, a las oportunidades, al desarrollo, a la tranquilidad y a una democracia más sólida y profunda”.