A pesar de los avances vistos en las relaciones Irán – EE.UU. parece ser que el desescalamiento del tono de estas es mucho más complejo. Hoy se conmemora el trigesimosexto aniversario de la toma de la Embajada de Estados Unidos y el secuestro de sus funcionarios, y en Irán se ha consolidado la fecha como una ocasión para despotricar sobre la potencia americana y reivindicar la «independencia» del país islámico.
A pesar de los avances recientes es claro que la política del país se encuentra polarizada frente a la relación que pueden tener con EE.UU., tanto así que Ali Jamenei, líder supremo aclaró a nivel nacional que la colaboración con el Gran Satán (EE.UU.) no pasará más allá del tema nuclear.
En este sentido, el día de hoy se volvieron a escuchar los cánticos de Muerte a Estados Unidos, y Muerte a Israel, y se añadieron unos que velaban por la caída del régimen saudí y el apoyo al Estado Islámico.
El viejo mantra en contra de la potencia americana fue reivindicado por el mismo líder supremo en celebración con los estudiantes, en la cual afirmó “No está dirigido contra el pueblo americano, sino contra las políticas de Estados Unidos y su arrogancia».