Son mejores las perspectivas a nivel global que a nivel local; pues el crecimiento mundial estaría por el orden del 3.4%; impulsado por el crecimiento de la economía en USA, que estará cercano al 2.3% ; y el de la zona euro, que estaría repuntando al 1.9%. Sinembargo, y pese a lo anterior, se respira un viciado ambiente de riesgo político y Geopolítico; atizado por el enfoque nacionalista de Donald Trump y la incursión de China en el mercado petrolero de Arabia Saudita, entre otros.
Por otra parte, desde el ámbito local, no deja de ser determinantemente nocivo, el inercial comportamiento de la inversión pública, que muestra 387 proyectos del Sistema General de Regalías suspendidos por asuntos de corrupción. Así también, observamos el descenso de la tasa de inflación, no por un desempeño loable de la política monetaria, sino por el impacto que la desaceleración económica ha tenido en la baja del IPC; Razón por la cual he decidido modificar el cálculo del IPC al 31 de Dic/17 en 3.7% y a Dic /18 en 3,3%.
Asímismo, en C/bia también tendremos un enorme riesgo político a finales de 2017 y en los primeros 8 meses de 2018, que llevarán a que solo la economía crezca a razón del 2.0% en 2018. Pero igualmente, la dimensión del comportamiento económico se verá afectada, por un déficit fiscal que llegará al 3% del PIB y un déficit en cuenta corriente que llegará al 3.2% en 2018.
Todo este escenario de indicadores económicos, nos muestra que Colombia, sigue un ritmo pertinaz de desaceleración, que se acentúa a 31 de Dic/17 con un crecimiento de la economía del 1.6% del PIB. Asímismo, esta situación precedente, podría verse reflejada en una posible baja de la tasa de interés de intervención del Banrepública a Dic/17 en niveles de 4.5%, y a Dic/18 en 4.25%.
Así las cosas, se hace necesario que los candidatos a la primera magistratura del estado, ya fueran hablando de los programas y propuestas de gobierno; y en especial del sendero que le plantearían al país nacional; en materia de impuestos, desempleo y reforma pensional.
Finalmente, reitero que el país tiene problemáticas muy profundas, pero ninguna como las de la crísis fiscal, económica, administrativa y pensional; que complementadas con las del abismo moral; dejan un panorama enrarecido para 2018.
Sin embargo, y pese a lo anterior; es preciso citar, que el 2018 sería un mejor año económico para el país; porque posiblemente se reducirián en pequeñas proporciones del PIB los denominados déficit gemelos; y porqué también por primera vez en los últimos 3 años creceríamos 0.4% por arriba del crecimiento del año anterior.
Es decir, hay que dar la bienvenida al año 2018, pues con él se terminarían tres largos años de desaceleración económica; abriéndose la posibilidad de consolidar la estabilidad económica. Pero solo bajo la alternativa, eso sí; de contar con un gobierno serio, comprometido y responsable, con el cumplimiento y logro de alcanzar una eficaz y efectiva administración de lo público.
Felices días
Henry Amorocho Moreno.