Todos ellos han sido recibidos por una comitiva de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) en la que ha participado el presidente catalán, Pere Aragonés.
A las 12 del mediodía de este miércoles ha salido de prisión Carme Forcadell, expresidenta del Parlamento catalán. Ha sido la primera líder independentista catalana en abandonar la cárcel después de que el Gobierno de España aprobara ayer los indultos a nueve de los condenados por el proceso separatista llevado a cabo en 2017.
Inmediatamente después, han salido de otros dos centros penitenciarios los ocho presos restantes. Todos ellos han sido recibidos por una comitiva de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), uno de los dos partidos que integran el Gobierno catalán. Hasta allí se ha dirigido el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés.
Las excarcelaciones se han producido después de que el Tribunal Supremo haya remitido a las cárceles los mandamientos de libertad de los nueve condenados en la causa del ‘procés’, tan solo unas horas después de que las medidas de gracia hayan sido publicadas en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
La medida ha contado con el fuerte rechazo de los partidos conservadores, que ya han anunciado recursos judiciales; y con la crítica de un sector del independentismo que estima que se trata de una medida insuficiente y exigen una amnistía que cubra también a los políticos huidos de la Justicia española, que residen en otros países europeos, y a otras personas que se han visto afectadas por procesos judiciales y multas por su participación en el referéndum unilateral.
Los presos liberados han sido recibidos por una multitud ante la que han querido decir unas palabras. Una de las intervenciones más duras ha sido la de Jordi Cuixart, presidente de la asociación Òmnium Cultural: «Es un día en el que los catalanes y las catalanas nos hemos de sentir orgullosos de lo que hemos hecho», ha dicho, en un discurso en el que se ha autodenominado como «preso político» y en el que ha querido mencionar al expresidente catalán Carles Puigdemont y a «todos aquellos que aún están sufriendo represión».
Además, ha añadido que «hoy no es un día de renuncia, sino un día para seguir luchando». «La represión no nos ha vencido y no nos vencerá. No existen indultos que hagan callar al pueblo de Cataluña», ha concluido Cuixart.
El resto de indultados que han tomado la palabra han hecho hincapié en que la prisión les ha reafirmado aún más en sus convicciones y en que van a seguir trabajado para conseguir la independencia de Cataluña. Así, el grito que ha cerrado todas las alocuciones ha sido: «¡Viva Cataluña libre!».