Poco se sabe de la familia de Vladimir Putin.
Y es que durante sus más de 20 años en el poder, el mandatario ruso ha sido del tipo de líderes que ha mantenido a sus seres querido fuera del ojo público.
En 2015, durante una de sus maratonianas conferencias de prensa, reconoció que el tema familiar era un asunto demasiado privado para él.
«Mis hijas viven en Rusia y estudiaron solo en Rusia, estoy orgulloso de ellas. Hablan tres idiomas extranjeros con fluidez. Nunca hablo de mi familia con nadie», explicó.
«Toda persona tiene derecho a su destino, vive su propia vida y lo hace con dignidad», agregó.
Pero aunque el mandatario ruso prefiere mantener a su familia alejada de la política y los titulares, la guerra en Ucrania ha traído otra vez sus nombres a la palestra.
Y es que este miércoles, en una nueva ronda de sanciones, Estados Unidos apuntó a las dos descendientes conocidas del mandatario: Maria Vladimirovna Vorontsova, de 36 años, y Katerina Vladimirovna Tikhonova, de 35.
«Creemos que muchos de los activos de Putin están ocultos con miembros de la familia, y es por eso que apuntamos contra ellos», dijo un funcionario estadounidense.
Las medidas siguen numerosas revelaciones de atrocidades cometidas por tropas rusas en Ucrania, incluidas imágenes de cuerpos de civiles esparcidos por las calles de Bucha, cerca de la capital, Kiev.
Rusia ha argumentado, sin evidencia, que las imágenes son puestas en escena de funcionarios ucranianos.
Aunque las imágenes satelitales han mostrado que los civiles murieron cuando los rusos tenían el control de Bucha, Putin describió el miércoles el evento como una «provocación cruda y cínica por parte del régimen de Kiev».
La familia de Putin
Aunque existe poca información oficial sobre la familia de Putin, algunos documentos, informes de medios y ocasionales pronunciamientos públicos han ayudado a proporcionar una imagen de quiénes son.
Las hijas conocidas de Putin son resultado de su matrimonio con Lyudmila Aleksándrovna Putina (aunque dejó de usar este último apellido tras el divorcio).
Putin y Lyudmila se casaron en 1983 cuando ella era azafata y él oficial de la KGB.
El matrimonio duró 30 años, un periodo que coincidió con el rápido ascenso de Putin a la cima del sistema político de Rusia.
En 2013, se separaron.
Putin dijo que «fue una decisión conjunta: apenas nos vemos, cada uno tiene su propia vida».
Lyudmila dijo, por su parte, que su pareja por tantos años estaba «completamente ahogado en el trabajo».
La hija María
La hija mayor, Maria Vorontsova, nació en 1985.
Estudió biología en la Universidad de San Petersburgo y medicina en la Universidad Estatal de Moscú.
Vorontsova ahora es académica y se especializa en el sistema endocrino.
Es coautora de un libro sobre el retraso en el crecimiento de los niños y figura como investigadora en el Centro de Investigación de Endocrinología de Moscú.
También es una mujer de negocios.
BBC Rusia la identificó como copropietaria de una empresa que planea construir un enorme centro médico.
Vorontsova está casada con el empresario holandés Jorrit Joost Faassen, quien trabajó en el gigante energético estatal ruso Gazprom, aunque, según algunas informaciones, se han separado.
Las personas que han hablado con ella desde la invasión de Ucrania dicen que apoya a su padre y ha puesto en duda la información internacional sobre el conflicto.
Vorontsova, según EE.UU., «dirige programas financiados por el Estado que han recibido miles de millones de dólares del Kremlin para la investigación genética y son supervisados personalmente por Putin».
La hija bailarina
En comparación con su hermana, Katerina Tikhonova ha estado mucho más a la vista del público, sobre todo debido a su talento como bailarina de rock n’ roll.
De hecho, quedó en quinto lugar en un evento internacional en el 2013.
Ese mismo año, se casó con Kirill Shamalov, hijo de un viejo amigo de Putin.
Su boda se celebró en una exclusiva estación de esquí cerca de San Petersburgo. Los empleados de la fiesta contaron que la pareja llegó en un trineo tirado por tres caballos blancos.
Shamalov fue sancionado por Estados Unidos en 2018 por su papel en el sector energético de Rusia. El Tesoro de EE.UU. dijo que «su fortuna mejoró drásticamente después del matrimonio».
La pareja se ha separado desde entonces.
Tras la invasión de Ucrania, dos activistas rusos fueron arrestados por ocupar una villa de lujo en Biarritz que se dice que es propiedad de Shamalov.
EE.UU. la describió al sancionarla como «una ejecutiva tecnológica cuyo trabajo apoya al gobierno ruso y la industria de defensa».
Se dice que ninguna de las dos mujeres pasa mucho tiempo con su padre.
El mandatario también tiene nietos.
Los mencionó en una llamada telefónica en 2017, pero no dijo cuántos tenía ni cuál de sus hijas eran.
«Respecto a mis nietos, uno ya está en la guardería. Por favor, comprenda, no quiero que crezcan como una especie de príncipes reales. Quiero que crezcan como personas normales», dijo.
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