El Congreso vota hoy sobre el acto legislativo para la paz, la guerrilla difiere sobre plazo para la firma de los acuerdos, y el método de refrendación de los colombianos sobre estos sigue en duda. Este es el panorama a día de hoy.
El Senado hoy se prepara para votar en el segundo de los ocho debates necesarios en el Congreso sobre la reforma constitucional y el método de “bajar los acuerdos de paz”. Esta iniciativa incluye facultades especiales para el Presidente Juan Manuel Santos, la creación de una Comisión legislativa especial para la paz en el Congreso, un Plan plurianual de inversiones para La Paz y la participación en política de las FARC. Recordemos que existen dos puntos básicos de la iniciativa que han generado preocupación: la participación política sin veeduría o comprobación de desmovilización de los miembros de las FARC y los poderes que tendrá el Presidente con base en este acto legislativo.
A esto además se suma la incertidumbre sobre el mecanismo para consultar a los colombianos, algo que fue prometido por el Gobierno desde el inicio del proceso. En el viaje de los congresistas la semana pasada a La Habana, quedó claro que las FARC insisten en una constituyente además de un mecanismo de consulta popular. Por su parte, el Partido de la U, a través de Roy Barreras, ha propuesto bajar el umbral para refrendar la paz, realizando un plebiscito en el cual los colombianos solo dirían Sí o No frente a la totalidad de los acuerdos. Esta propuesta recibió el impulso del Ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, quien planteó que es necesario dejar claro el mecanismo de refrendación antes de finalizar el año. En este sentido, el senador Armando Benedetti Villaneda, quien es ponente del proyecto de reforma al plebiscito, busca agilizar el tema en el congreso y lograr el plebiscito sin umbral.
No obstante, lo más llamativo es que mientras el Congreso revisa la iniciativa de reforma constitucional, Carlos Antonio Lozada, jefe guerrillero de las FARC establece que este debate no es representativo de la organización guerrillera y, que por lo tanto, no lo apoyan. Aún más, afirmó que no ha iniciado el plazo de seis meses establecido con el Gobierno para la firma de la paz: “es un debate que habrá que realizar en la mesa cuando tratemos de ver en qué momento se cierra el tema de justicia, en ese momento se podrá ver a partir de qué día comienzan a contarse los 6 meses”. Finalmente, reiteró que no están de acuerdo con el plebiscito sino con la Asamblea Nacional Constituyente. Lo anterior, aunado a la firma de los 75 puntos de los acuerdos que para las FARC son definitivos y para el Gobierno “requieren desarrollo”.
Parecería que el panorama actual de la paz no está claro y que las posiciones encontradas pueden atrasar más el proceso.