Costa Rica había sido apabullada por España por siete goles a cero, en la que ha sido la mayor goleada de los españoles en la historia de los mundiales.
Por eso el partido en la cancha del estadio Ahmad Bin Ali tenía una carga especial: ambas selecciones venían a restablecer su curso normal.
Pero no fue para nada un partido monumental, más bien lo contrario: parecía que ambas selecciones estaban ya eliminadas.
Valga decir que Costa Rica tuvo una presentación mucho más decorosa de lo que fue aquella noche nefasta ante los españoles y con un gol milagroso de Keysher Fuller en el minuto 79 logró vencer a los japoneses.
Era el primer disparo que Costa Rica hacía en una portería contraria en todo el Mundial. Y fue gol.
Para poder clasificarse, los ticos deben primero saber qué pasa esta noche entre Alemania y España.
Con eso en mente deberán buscar una categórica victoria frente a Alemania este jueves por el último partido del grupo E.
Sin embargo, también deben esperar que Japón no le gane a España, porque de lo contrario, sumará los mismos seis puntos -y en ese momento habrá que tener en cuenta que Costa Rica tiene un gran número de goles en contra.
Ahora, con un empate también podrían clasificarse, pero dependerá de otros resultados: de nuevo, que Japón no sume puntos frente a España en el último partido y que Alemania no le gane a España esta noche.
Posesión, pero no control
Fue un primer tiempo que se jugó lejos de los arcos, con una lucha decidida por el control del mediocampo para generar juego. Fue mucho más efectivo Costa Rica, que logró tener la pelota mucho más tiempo.
Sin embargo, la defensa japonesa logró contener con éxito cualquier avance de los ticos, que lo intentaron constamente con sus delantero Joe Campbell.
Pero a la hora de pasar al ataque, Japón no logró mostrar la movilidad y la velocidad que hizo desbarrancar a Alemania en el primer partido de este grupo este miércoles.
Solo tuvo un disparó al arco, que se fue desviado. Y pocas veces fueron una amenaza para el portero del PSG Keylor Navas.
«Alemania debe estar rascándose la cabeza y preguntandose: ‘¿Cómo perdimos contra Japón?‘. Están luchando mucho para dar alguna impresión», dijo el comentarista de la BBC y ex jugador del Liverpool Stephen Warnock.
Pero apenas comenzó el segundo tiempo, Japón avisó que tenía otras intenciones: en apenas un minuto y medio de reiniciado el partido, puso en peligro dos veces la defensa costarricense.
Un minuto y medio que fue mucho mejor que los 45 minutos del primer tiempo.
Y lo que también quedó claro en esos primeros minutos es que Japón quería el partido: el técnico japonés Hajime Morayasu hizo ingresar Takuma Asano, el delantero del VfL Bochum de la Bundelisga, para darle mayor vólumen de juego en el área.
En cierta medida fue efectiva, porque Costa Rica perdió el control de la pelota y los japoneses continuaron acechando el arco de Navas en otras ocasiones.
La hinchada de Costa Rica no perdió la fe y entonó varias veces un himno que ya es un canto de guerra para los equipos considerados pequeños: «¡Sí se puede!», «¡Sí se puede!».
Y se pudo.
En el minuto 79: después de una curiosa triangulación en el costado derecho Keysher Fuller, del Herediano de Costa Rica, termina metiendo la pelota en el arco japonés con un precioso globito.
Celebraron hasta las montañas y los volcanes.
Y con esta victoria Costa Rica, después de verse más afuera que adentro, revive de las cenizas y se mete en la pelea por el grupo E del Mundial de Qatar.