Con un Adiós a las armas y a la guerra, y una bienvenida a la paz, terminó alias Timochenko su intervención en el acto final de dejación de armas cumplido este martes en la vereda Buenavista, del municipio de Mesetas, en el Meta. El hecho, fue refrendado por el jefe de la Misión de la ONU Jean Arnault y el presidente Juan Manuel Santos.
No obstante, el cabecilla de las Farc acusó al gobierno de negligente y de incumplir lo pactado, por la no liberación de los guerrilleros indultados o amnistiados y por no atacar el fenomeno del paramilitarismo ni contener el asesinato de líderes sociales y de militantes del grupo armado.
Empero Timochenko advirtió: “Cumplimos. Hoy dejamos las armas. El Estado nos ofreció un pacto para construir. Estamos listos para seguir ese camino”.
Agregó que en la fecha ponían fin al alzamiento armado para entrar a la legalidad del país si armas y pacíficamente, pero a la vez advirtió que el Estado debía cesar toda persecución política en Colombia.
A su turno, el presidente Juan Manuel Santos aseguró que el gobierno está cumpliendo y seguirá cumpliendo lo pactado y agregó que espera que las Farc lo sigan haciendo.
Reconoció que aún quedan muchas diferencias por resolver y dificultades por superar, pero destacó que sin armas, sin violencia, no somos más una historia de dolor y muerte en el planeta.
La dejación de las armas es el símbolo del nuevo país que podemos ser y estamos comenzando a ser, dijo Santos y agregó: “Hemos logrado mucho –a pesar del conflicto– y ahora podemos hacer más, muchísimo más, para seguir reduciendo la pobreza y las desigualdades, y generando prosperidad para todos”., aseveró
“Lo dije hace un año y lo repito ahora: no estoy y seguramente nunca estaré sobre el modelo económico y político que según ustedes (las Farc) debe tener nuestra nación, pero defenderé sus derechos para expresar sus ideas, porque esa es la esencia de la libertad”, expresó el primer mandatario.
