En su novena edición, tendrá lugar en Buenos Aires entre el 8 y el 10 de junio próximos.
Abogado especializado en criminología y académico, Diego Diéguez también es un apasionado de la política y de la comunicación. Por esa razón, vino a la provincia con un objetivo muy claro: promocionar la novena edición de la Cumbre Mundial de Comunicación Política (8 al 10 de junio en la Ciudad de Buenos Aires), que reúne a la vanguardia de la especialidad. Diéguez dijo que habrá alrededor de 200 disertantes de 25 países occidentales, y entre 2.000 y 2.500 asistentes. La agenda incluye ponencias sobre libertad de expresión; campañas electorales; medios y opinión pública; comunicación de gobierno, y Justicia y política, tema que está muy en boga tanto en Argentina como en Brasil. “Es un encuentro plural, que cuenta con el aval de la Universidad Católica Argentina”, explicó.
Diéguez comentó que el debate sobre la comunicación está a la orden del día. “Comunicar es importante, pero lo fundamental es la política. Si no hay actos de gobierno, de nada sirve hablar por hablar. Nosotros vemos en el presidente actual (Mauricio Macri) un esfuerzo por diferenciarse de la mandataria anterior (Cristina Kirchner)”, opinó.
El promotor de la Cumbre Mundial de Comunicación Política apuntó, durante una visita a este diario, que los Tribunales Federales de Comodoro Py están asociados con la investigación de los altos funcionarios de la administración nacional. “Por esa razón, Comodoro Py se ha transformado en un ícono en sí mismo. Para un político, es un estigma estar involucrado en casos que tramitan ante esos juzgados”, analizó. Y expresó que los avances en las investigaciones que implican al kirchnerismo se inscriben en un “hecho político”. “Los jueces federales se despertaron en los últimos meses. Esto no es una casualidad”, evaluó.
Diéguez manifestó que cuando la política entra en el despacho de un juez, la Justicia salta por la ventana. “Esto no es nuevo. Hay una tendencia de los magistrados a ser respetuosos con el oficialismo”, comentó. Y recordó que al presidente Macri lo tuvieron procesado hasta el día después de que ganó la elección nacional: “llega a la Casa Rosada e inmediatamente lo sobreseen. Eso es un hecho político”.
El modelo superador de estas especulaciones judiciales es la investigación en tiempo real, según Diéguez. “Cuanto uno más se aleja de la fecha del delito, más posibilidades tiene de no poder esclarecerlo”, comentó. El letrado, que es uno de los organizadores de la Cumbre, afirmó que existen jueces que actúan con distintas velocidades en función de quiénes son los denunciados. Puso como ejemplo el caso de Milagro Sala, que fue detenida al poco tiempo del cambio de gobernantes en Jujuy, y, también, el desempeño cuestionado de Sebastián Casanello, juez federal porteño encargado de investigar al empresario ultrakirchnerista Lázaro Báez. “La única manera de salir de estos dobles estándares de actuación judicial es la pesquisa en tiempo real, es decir, de inmediato en todos los casos”, insistió.
foto de Florencia zurita