El portavoz Alfonso Prada dijo que si se produjo la libertad de Alfonso López, fue en la autonomía del juez y por equivocación. Recalcó que el hijo de ‘la Gata’ lleva en esa labor hace 47 días.
El Gobierno reiteró que «no ha solicitado la orden de libertad de Jorge Luis Alfonso López, quien hoy cumple una condena en prisión domiciliaria» y precisó que mediante la Resolución 075 de 2022, se autorizó a El Gatico «para que contribuya en la labor asignada al alto comisionado para la paz de verificar la voluntad real de paz y reinserción a la vida civil, así como la voluntad real de sometimiento a la justicia de los grupos armados organizados».
Dicha designación, aseveró, está vigente por un periodo de dos meses y la labor como facilitador de López se ejerce desde su lugar de reclusión, sin que esto signifique configuración de delitos adicionales a los que ya fueron probados por la justicia.
La Oficina del Alto Comisionado para la Paz, se lee, «ha verificado que el señor López sigue ejerciendo en el día de hoy su rol de facilitador desde su lugar de privación de la libertad» y aclara que el hijo de la condenada empresaria del chance, Enilse López, alias La Gata, «es facilitador de paz desde su lugar de reclusión, y no gestor de paz como se afirma en algunos medios de comunicación en forma equivocada», agregando que la labor de los facilitadores es «contribuir a los acercamientos y conversaciones que posibilitarán el desmantelamiento de grupos armados ilegales, en lo que estamos empeñados, que opten por acogerse a la justicia en el marco de la política de paz total».
Por ello, asevera, la Oficina del Alto Comisionado para la Paz «ha certificado que el señor López ha desempeñado durante 47 días esta labor desde su sitio de reclusión» y que para finalizar este encargo le quedan 13 días.
Por ello, el Gobierno Nacional, «respetando la independencia de poderes y la autonomía de la Rama Judicial, pide al juez que otorgó la libertad del señor López que revoque la decisión, ya que no está fundamentada en las leyes vigentes».
Y concluyó Prada asegurando: «No hemos solicitado ninguna libertad, y si ella se produjo se da en la autonomía del juez, quien entendemos en una equivocacion no ha utilizado las leyes vigentes para esta materia».