Para hombres y mujeres el orgasmo es la culminación de la satisfacción sexual . Desafortunadamente no todos pueden experimentar un orgasmo a plenitud; se sabe que el 90% de las causas son psicológicas, entre las que encontramos: Experiencias sexuales traumáticas o negativas, sensación de vergüenza, ansiedad, estrés, depresión, adicciones, masturbación, culpabilidad del disfrute sexual,educación moral y religiosa restrictiva, considerar el sexo como pecaminoso o sucio, imagen corporal negativa etc.
En el hombre las disfunciones orgásmicas se denominan eyaculación precoz y eyaculación retardada, mientras que en la mujer la incapacidad para experimentar un orgasmo se le llama anorgasmia. A las mujeres les resulta más evidente saber cuando su hombre tiene una excitación por el nivel de erección del pene e identificar cuando llega al orgasmo o eyacula, por el flujo de espermatozoides, mientras que a los hombres les resulta más difícil detectar si la excitación y el orgasmo femeninos son reales o hacen parte de una representación teatral.
Un orgasmo es una sensación de placer físico intenso y liberación de tensión, acompañada de contracciones rítmicas e involuntarias de los músculos del piso pélvico. Sin embargo, La forma en que se siente un orgasmo varía entre una mujer y otra. Existen varios tipos de anorgásmia:
- Anorgasmia primaria: Se caracteriza por nunca haber experimentado el orgasmo, ni a través del la penetración ni mediante la masturbación
- Anorgasmia secundaria: Se caracteriza por haber experimentado orgasmos en algunas ocasiones o con normalidad y deja de experimentarlos de forma sistemática.
- Anorgasmia relativa: cuando se es incapaz de llegar al clímax de una forma determinada; por ejemplo, anorgasmia mediante la penetración o coito.
- Anorgasmia situacional: cuando puede alcanzar el orgasmo sólo en determinadas circunstancias específicas por ejemplo masturbandose o con algunas personas si y con otras no.
Diversos estudios muestran que los hombres y en mayor proporción las mujeres fingen el orgasmo. La encuesta Trojan Charged Sex Life, realizada en diez ciudades estadounidenses arroja que el 60% de las mujeres admiten haber fingido orgasmos, mientras que la proporción es solo del 19% en el sexo masculino. Un gran número de mujeres durante la relación sexual gesticulan, emiten gemidos, gritan, dicen palabras obscenas y hasta golpean como expresión de inmenso placer. Sin embargo, Dos estudios realizados en Inglaterra y en Nueva Zelanda consultaron sobre por qué necesitaban emitir gemidos y expresiones de placer, a lo que aproximadamente el 90% de las encuestadas respondió que lo hacían para aumentar la autoestima de sus parejas, y un 50% agregó a la respuesta anterior otros factores: dolor durante el coito, aburrimiento, cansancio y para que termine o eyacule rápido.
En el mundo hay millones de mujeres que no logran experimentar plenamente un orgasmo con su pareja y en lugar de conversar sobre el tema y buscar ayuda profesional con un psicólogo sexologo calificado, deciden mantenerles bajo engaño y hacer de la relación un teatro permanente renunciando a sus derechos a vivir una sexualidad plena por temor a causar malestar e insatisfacción en su pareja, pero en su interior van cargando una frustración e infelicidad a la que terminan acostumbrándose, desconociendo que su problema tiene solución.
La anorgasmia es una disfunción sexual de carácter psicológico que tiene un buen pronostico si son tratadas en forma seria por un psicólogo sexólogo o terapeuta sexual, esto es mejor que tomar decisiones equivocadas como la de ingresar a la larga lista de infieles, frustradas y depresivas. En todo caso siempre es mejor prevenir que lamentar.
Dr Jaime Acosta – Contacto 3045660217
Psicología Clínica, Terapia de Parejas, Sexología, Adicciones, Trainer en PNL e Inteligencia Emocional, Psiconeuroendocrinoinmunología, Terapia psicosomática, Entrenamiento Mental