Por: Álvaro Ramírez González
El país de Petro, es un circo, mejor, una Torre de Babel.
Además de todas las crisis que atraviesa este mandato, en lo político, en la efectividad misma de la gestión, en la ausencia y el desapego de Petro y Francia por las regiones, aparece ahora una situación diplomática lamentable, deja al país por el suelo, y a su presidente como un hazmerreír mundial.
Desde la primera aparición de Petro, en la Asamblea de la ONU, dejó completamente desconcertado al auditorio y a la prensa del mundo, con su peregrina teoría, de que el petróleo, le hacía mucho más daño a la humanidad, que la cocaína. ¡El mundo no lo podía creer!
La segunda aparición de Petro en la ONU, tenía un auditorio casi vacío.
El mundo no estaba interesado en escuchar más tonterías y justo eso pasó.
Un Intervención de un chiflado, que resolvió arreglar el mundo, con un par de sus ideas luminosas, cambiar la economía que rige el mundo, con una conferencia y detener las guerras en Ucrania y el Medio Oriente, con otra es apenas ignorante y tonto. Ha habido ya decenas de conferencias, que no han logrado resolver ambas crisis.
Naturalmente el aplauso al terminar esa segunda intervención, fue casi imperceptible, por un auditorio casi vacío, pero las bodegas Petristas, editaron el copioso aplauso de la Asamblea al presidente Joe Biden, y lo publicaron como si fuera al discurso de Petro. Naturalmente en pocas horas esa payasada se cayó.
Ahora, ante la crisis de Israel con Hamas, en la franja de Gaza, la intervención televisada de Petro, fue tan equivocada como vergonzosa, pretender igualar al Estado de Israel con los Nazis, es una brutalidad que no tiene perdón.
¿Cómo desconoce Petro, que fueron justamente los Nazis, los que asesinaron a 6 millones de judíos?
La respuesta del Embajador de Israel en Colombia no se hizo esperar, y fue muy dura en reclamar respeto por el Estado de Israel y equilibrio y justicia en las opiniones del primer mandatario.
¿Y dónde quedo para Petro, la masacre del grupo terrorista Hamas el 8 de octubre, que asesinó sin misericordia a 1.300 civiles y secuestró 200 más?
¿Qué opina Petro, de ese acto criminal que condenó el mundo entero?
Pues se le armó una pelotera tan grande como que los Estados Unidos, protestaron de manera muy fuerte contra esta desafortunada intervención y entró en crisis la diplomacia colombiana con la torpe insinuación del canciller Leyva de expulsar al embajador judío, que después tuvo que enmendar.
Israel anunció la suspensión inmediata de entregas de suministros a Colombia, queda así todo el aparato militar colombiano en crisis, además de muchas otras industrias cuyos equipos e insumos viene de Israel.
Petro resolvió recular y llamar al Embajador Israelí, para dorar la píldora y también al Embajador Palestino.
Y así quedó la foto, un mandatario que se pone al lado de los terroristas de Hamás, y contra el Estado legítimo de Israel.
Naturalmente las relaciones diplomáticas con este último país, quedan pegadas con mocos y Colombia al lado de Cuba e Irán, y contra todo el mundo civilizado.
¡Es esta otra de las pistas del Circo de Petro! ¡La diplomacia!
vía ifmnoticias