Según la entidad, han salido de manera forzosa del Alto Baudó 1.771 personas; del Medio Baudó, 247, y del Bajo Baudó, 48.
Cerca de 450 personas que abandonaron sus hogares desde el pasado miércoles por combates de grupos paramilitares y la guerrilla del ELN en el municipio de Alto Baudó, Chocó.
Los desplazados pertenecen a las comunidades embera de Dipurdú, Siorodó, Konondó, Tigre, Docasina, Cañadó y Piedra Mula, que según la entidad huyeron por el río Dubaza hasta la comunidad indígena de Catrú Central, en el mismo municipio.
El defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, pidió la “atención oportuna y eficaz” para las familias víctimas de desplazamiento forzado y que se convoque al comité local de justicia transicional para que se determinen las necesidades de salud o alimentación.
El ente recordó que el 29 de septiembre de 2019 emitió una alerta temprana por confinamiento y riesgo de desplazamiento en Alto Baudó, especialmente de comunidades como Urudó, Puerto Córdoba, Boca de León, Apartadó, Amparradó, Peña Azul, Cocalito y Las Delicias.
“El riesgo en la zona es por la expansión y el copamiento de las AGC de territorios que fueron de control del Frente Resistencia Cimarrón del ELN, para obtener la hegemonía y el control territorial del corredor de comunicación para abastecimiento de tropas armadas y el tráfico de armas e insumos para la cadena productiva de la coca en la subregión del Baudó”, explicó la Defensoría.
Tras la emisión de esa alerta temprana, la entidad publicó nueve oficios de consumación dirigidos a la Comisión Intersectorial para la Respuesta Rápida a las Alertas Tempranas (Ciprat), en los que hizo referencia a enfrentamientos entre grupos ilegales como el ELN, los cuales han derivado en desplazamientos masivos y confinamientos.