La Policía de Bogotá confirmó que una de las balas de los sicarios impactó al niño de 14 años que murió en la calle 183 carrera 9. Inicialmente, la Policía había dicho que el cuerpo del menor no tenía signos de violencia.
La Policía confirmó que el niño de 14 años que iba en el vehículo que fue atacado por sicarios en la calle 183 con 9, norte de Bogotá, murió por una de las 7 balas que impactó primero en su padre, el hombre identificado como Carlos Ernesto Gaviria y quien también murió en el lugar de los hechos.
El menor, según las autoridades, iba hacia el colegio Vermont donde recibía clases; sin embargo, uno de los proyectiles que dispararon los sicarios primero impactó el cuerpo de su padre y ese mismo disparo, entró por la parte izquierda del tórax del niño, herida que finalmente también le quitó la vida a este menor.
“La verdad en estos momentos se acaba de realizar la inspección técnica que acaba de haber por parte de nuestro CTI donde se verifica y efectivamente uno de los impactos que fue prácticamente al padre del joven también lo impacta y le quita la vida de esta manera”, indicó el coronel Javier Gallego, comandante de seguridad ciudadana de la Policía Metropolitana de Bogotá.
Por instrucción directa del general William Salamanca, en el lugar hizo presencia la general Sandra Hernández , comandante de la Policía de la ciudad, quien dispuso todas las capacidades de la policía en un operativo de plan candado en la ciudad para identificar y capturar a los dos sicarios que huyeron en una moto. En el lugar de los hechos también su presencia la familia de las víctimas, quienes exigen justicia y que le den captura cuanto antes a los delincuentes.
“Ya estamos nosotros realizando sin embargo las investigaciones y somos contundentes también en decir que la Policía Nacional, los diferentes organismos de seguridad en estos momentos vamos a ser contundentes en el sentido de verificar y ubicar a los sicarios que cometieron lógicamente este hecho de sangre en esta parte de la ciudad”, agregó Gallego
Inicialmente, la misma Policía había informado que el cuerpo del niño no tenía signos de violencia, e incluso se llegó a especular, que el cadáver ya estaba frío. Esto había dicho el coronel Gallego en Blu Radio: “El joven de 14 años es el hijo del conductor, estamos ya verificando, teniendo en cuenta que, de acuerdo a las circunstancias, hasta el momento no presenta ningún tipo de signos de violencia, es lo que estamos determinando también en la inspección a técnica cadáver con nuestro Cuerpo Técnico de Investigación”